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lunes, 21 de junio de 2010

VIIº Encuentro Familiar del Diaconado en el País Vasco y Navarra


El Diácono, misionero al servicio de la comunidad

Los días 5 y 6 de junio tuvo lugar en el Centro Diocesano Javier de Javier, Navarra, el séptimo encuentro de diáconos permanentes de las diócesis del País Vasco y Navarra, con el lema “El diácono, misionero al servicio de la comunidad”. Al encuentro acudieron diáconos, candidatos, aspirantes y esposas de las diócesis de Bilbao, Vitoria, Zaragoza y Pamplona. En esta ocasión se dieron cita todas las familias para compartir sus experiencias y momentos de oración, formación y convivencia.

Tras la presentación de los asistentes y la oración de Laudes, Fidel Molina, diácono de Vitoria y Marisa Emborujo, su esposa, bajo el título “¿Te pones en el borde del camino?”, presentaron el trabajo que realizan en las parroquias del casco antiguo de Vitoria con el Proyecto Berakah. Este proyecto integrado por más de ciento cincuenta voluntarios está dedicado a los inmigrantes, las familias gitanas, la gente mayor en soledad, las mujeres prostitutas y las personas “sin techo”. En definitiva el servicio diaconal dedicado a los marginados de nuestra sociedad.

A continuación y con la presencia del Vicario General de nuestra Diócesis D. Juan Antonio Aznárez, se informó sobre las diferentes situaciones en las que se encuentra el diaconado permanente en cada una de las diócesis representadas.

Por la tarde, el segundo momento de trabajo y bajo el título del lema del encuentro, “El diácono, misionero al servicio de la comunidad”, el padre Javier Rico Aldave, misionero idente, desarrolló una visión especialmente abierta del diácono inmerso en las dificultades del mundo de hoy.

En la jornada dominical las familias diaconales realizaron una vista guiada al Castillo de Javier con las explicaciones del P. Benito Martínez, S.J. Después de visitarla, el grupo participó de una Eucaristía en la Basílica en la Solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo.

Una de las novedades del encuentro fue la presencia del aspirante de Zaragoza, Agustín Gabarre junto a su esposa Ana Belén, quienes desempeñan una importante labor dentro de la pastoral gitana, etnia a la que pertenecen.

Poco a poco va aumentando el número de asistentes a estos encuentros a medida que se va instaurando y desarrollando el diaconado en las diócesis de la zona norte, así como va mejorando la infraestructura en cuanto a organización y asentamiento de los mismos. De esta manera, ya quedaron establecidos los encuentros en enero con motivo de la festividad de San Vicente, diácono y mártir y en junio, los días cercanos a la celebración del diácono y doctor de la Iglesia, San Efrén.

El encuentro de familias de los diáconos permanentes se desarrolló en un clima fraterno, de acogida e intercambio de experiencias, en un enclave privilegiado, en plena naturaleza, lo que permitió a los asistentes fortalecer sus compromisos de servicio a quienes más sufren en nuestra sociedad.


Fernando Aranaz Zuza
Diacono de la Diócesis de Pamplona