domingo, 15 de enero de 2012
¡ No tiene límites el bien que hace la Caridad !
Si posees bienes externos, da lo que tienes; en caso contrario, muestra buena voluntad y, si puedes, aconseja y ayuda, y si finalmente no puedes ni aconsejar ni ayudar, expresa tu buen deseo y ora por el atribulado, y sin duda, Dios oye antes esta oración quie la del que ofrece pan. Tiene siempre algo que dar aquel cuyo pecho está henchido de Caridad.
San Ambrosio
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Pensamientos